Roma (Italia). El Sínodo amazónico iniciado el 6 de octubre de 2019 está por concluirse y resuenan las palabras del Pontífice: “La Iglesia Católica entera está implicada en los desafíos de una región ciertamente periférica pero cuyas cuestiones humanas, ecológicas, sociales y económicas tienen un impacto sobre toda la humanidad.”

El Sínodo Amazónico ha sido una oportunidad de diálogo y de confrontación. Millares de personas han hecho sentir su voz, han formulado sus propuestas, han expresado sus opiniones para construir una iglesia con rostro amazónico, una iglesia que lleve su esencia, su especificidad a la Iglesia universal.

Amazonia: Casa Común ha sido el reflejo de ello, el compromiso de llevar la Amazonia a Roma para permitir a los fieles y a los ciudadanos comprender la realidad y la riqueza espiritual de esta área esencial para el presente y para el futuro del planeta.

En la Amazonia, Maloca es el lugar en que las comunidades indígenas se sientan para simplemente estar, escuchar, celebrar y ser capaces de comprender lo que sucede en la vida de la comunidad.

Amazonia: Casa Común, en Roma ha tenido este espíritu, ser como la “Gran Maloca” donde todos se han podido encontrar, rezar, escuchar y confrontarse, no como huéspedes sino como hermanos de la única gran familia humana. Un espacio para la reflexión, la discusión, el diálogo, las conversaciones, pero sobre todo la escucha y la plegaria.

Con este espíritu, las Hijas de María Auxiliadora de la Casa Generalicia FMA y de las comunidades de la Visitaduría Maria Madre della  Chiesa  han participado como voluntarias en la gran tienda de la Amazonia, en la Iglesia de la Traspontica en Roma, acogiendo y acompañando a los peregrinos y los participantes en el Sínodo en este lugar de diálogo intercultural para caminar juntos en senderos nuevos, con respeto, tolerancia, intercambio, aceptación, apertura, reciprocidad, diálogo y escucha.

En estos días del Sínodo los distintos eventos realizados han ayudado a seguir los pasos del Sínodo y alimentado  los intereses, la plegaria y la solidaridad que tienen eco dentro de nosotros, en las organizaciones, en la Iglesia y en el mundo.

Esta acogida y oración continúa sosteniendo “Amazonia: Casa Común” en el respeto a la diversidad en las otras expresiones del encuentro con Cristo, aún frente a algunos tristes episodios (hurto de estatuillas y destrucción de imágenes amazónicas) y actos de intolerancia: “Pidamos a todas las personas de buena voluntad que permanezcan unidas, se mantengan firmes en el compromiso y en la esperanza por la defensa de la vida y de la Amazonia”, se lee en el Comunicado del 21 de octubre de 2019.

“Él no se cansa de repetir “todos”. Todos, porque ninguno está excluido de su corazón, de su salvación; todos, para que nuestro corazón vaya más allá de las costumbres humanas, más allá de los particularismos fundados en egoísmos que no agradan a Dios.”  (Papa Francisco – Homilía 20 de octubre de 2019)

Comunicado Amazonia Casa Común

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.