Tor Bella Monaca (Roma). El deseo de dar acogida a niños y jóvenes de los Centros diurnos “Casa mia, Casa nostra” del barrio Tor Bella Monaca di Roma, apoyados por la Asociación Vides Mic Mag TBM, ha animado a los voluntarios, que han puesto a disposición tiempo y capacidades, para adecuar los espacios a las normas debidas a la pandemia de la Covid-19.
Gracias al compromiso del Vides hacia estos Centros – que permiten a los niños y jóvenes en situaciones de pobreza o de vulnerabilidad tener un ambiente educativo sereno y acogedor – , a las ayudas de la Parroquia S. María Madre del Redentor, de la Caritas Diocesana y de los bienhechores, ha sido posible adaptar y reorganizar los ambientes, dotándolos de divisores y marcadores de posición y proporcionando mascarillas, viseras, termómetros y detergentes higiénicos.
Los centros diurnos terminaron la jornada con la cena preparada por los voluntarios que, con la emergencia sanitaria, ahora recogen y distribuyen alimentos todos los días ofrecidos por algunos comerciantes a las familias de los Centros, a la Caritas y a otros entes religiosos a favor de los pobres, poniendo en red las ayudas recibidas.
En el tiempo de Navidad, gracias a la colaboración con el Banco de alimentos, a la recogida realizada por la Escuela S. Maria Mazzarello de las Hijas de María Auxiliadora de la Inspectoría Romana San Giovanni Bosco (IRO) y al regalo de vales ofrecidos por los bienhechores, la Asociación ha podido llegar a todas las familias con un paquete de regalo sustancial. Los niños y jóvenes han recibido regalos y dulces de los bienhechores.
Como cada año, la empresa alimentaria ha promovido la iniciativa “Babbo Albero”, en la que cada niño y joven de los Centros ha escrito una carta, pidiendo lo que deseaba recibir (material escolar, ropa u otros objetos necesarios). Las cartas, simbólicamente colgadas de un árbol, han sido recibidas por cada dependiente de la agencia que, según las posibilidades, ha hecho lo requerido.
Los rostros y las expresiones felices de niños y jóvenes han pagado a los operadores, voluntarios y bienhechores que han pasado tiempo haciéndoles vivir a ellos y a sus familias una Santa Navidad de alegría y serenidad.
