Lima (Perú). Del 17 al 21 de enero de 2022, en la modalidad online, la Inspectora, sor Elsy Núñez, y la Delegada, sor Rosa Mollo, compartieron la experiencia del Capítulo General 24º con las Hijas de María Auxiliadora y los laicos de las Comunidades Educativas de la Inspectoría S. Rosa de Lima (PER).
Unos días antes, el 13 de enero – primera conmemoración mensual de Madre Mazzarello en el 150º de la fundación del Instituto – se había realizado un encuentro online inspectorial con la entrega de las Actas del Capítulo, en el cual participaron todas las FMA de la Inspectoría y algunos representantes laicos de los distintos grupos: jóvenes, educadores, padres y miembros de la Familia Salesiana.
Se pidió a cada Comunidad que estableciera el “rincón del Capítulo”, para celebrar la entrega de las Actas del Capítulo. Después de invocar al Espíritu Santo y de haber visto un video sobre el texto de las Bodas de Caná, todos fueron invitados a llevar al “rincón del Capítulo” un vaso de agua, el agua de la propia existencia y de la contribución de cada uno/una, que sería transformada en vino. Las Directoras después distribuyeron el Documento a cada Comunidad para que cada uno/a pudiese prepararse personalmente.
En la Asamblea inspectorial, del 17 al 21 de enero, estaban conectados online 160 participantes, entre FMA y laicos, para acoger, conocer, reflexionar sobre la experiencia capitular, a partir de la cual elaborar el Proyecto inspectorial.
En los primeros tres días, sor Rosa y sor Elsy se alternaron respectivamente en la presentación de la parte introductoria del Documento – Presencia que se pone a la escucha, que camina juntamente, comunitaria “en salida” y en red – y sobre las opciones prioritarias: Formación, Sinodalidad misionera, Ecología integral. A los distintos momentos siguieron el compartir en pequeños grupos por medio de la plataforma. El 4º día se presentó la Deliberación Capitular.
El último día fue dedicado a sintetizar las resonancias y a delinear los objetivos, teniendo en cuenta las opciones prioritarias del Instituto FMA y las realidades inspectoriales.
La Asamblea concluyó con un momento de oración, durante el cual los/las participantes degustaron el vino: el agua dejada al inicio en el “Ángulo del Capítulo” se había transformado en vino bueno, en el vino nuevo que cada Comunidad Educativa del Perú quiere ser.
Los encuentros online de transmisión del Capítulo se realizaron durante las mañanas, mientras que por la tarde se reunía un equipo compuesto por las dos Capitulares, por Oscar Becerra, que desde hace algunos meses guía la elaboración del Proyecto Inspectorial, por el equipo “Bodas de Caná”, constituido para guiar la redacción del nuevo Proyecto, y por un grupo de FMA “facilitadoras”, con la tarea de guiar el trabajo grupal durante la transmisión del capítulo y llevar a cabo el trabajo de síntesis por la tarde.
Fue una semana intensa, fraterna, serena, en que los/las participantes se dejaron conducir e iluminar por la narración capitular. Como escribe Madre Chiara Cazzuola en la presentación de las Actas:
“El Capítulo General XXIV no ha terminado, ahora continúa en la historia de cada FMA, de todas las Comunidades Educativas, en los lugares en que compartimos la vida y la misión junto a las/los jóvenes y a los laicos. Se realizará de verdad y traerá fruto si somos dóciles a la escucha de Dios, de su Palabra, de la realidad, de las personas, prontas a hacer “Todo lo que Él nos diga”. Sólo así Jesús podrá continuar transformando el agua de nuestra existencia en vino nuevo y bueno, dándonos el coraje de ser personas y comunidades generativas de vida, de afrontar los desafíos que encontremos y de hacer operativas las opciones que hayamos indicado”.
Gracias