Maputo (Mozambique). El 2 de febrero de 2022, en la Casa Inspectorial de Maputo, las  Hijas de María Auxiliadora de la Inspectoría San Juan Bosco (MOZ) recibieron la visita del Embajador del Japón en Mozambique, el Sr. Senhor Kimura Hajime, con el objetivo de un apoyo económico al Proyecto para la construcción de la Biblioteca y del Aula informática de la Escuela Secundaria Maria Mazzarello de Pemba, en la Provincia de Cabo Delgado.

Esta Provincia en los últimos tres años se ha visto afectada por enfrentamientos y guerrillas que impiden la continuidad escolar y provocan el desplazamiento de estudiantes de sus aldeas a la ciudad de Pemba, donde muchos son acogidos en la Escuela de las FMA.

En la visita del Embajador estaban presentes la Inspectora, sor Carolina Ilda Herminio, las FMA de la Comunidad de la Casa Inspectorial, los colaboradores laicos y una representación de las Escuelas: seis estudiantes de la Escuela S. Juan Bosco de Jardim, Maputo, algunos alumnos/as de la Escuela Madre Mazzarello de Pemba, y cuatro niñas del Centro de acogida Maria Auxiliadora  de Namaacha, provenientes de la Provincia de Cabo Delgado, que con sus familias han tenido que dejar su propia tierra de origen.

Este acto oficial marca una etapa en la colaboración entre la Embajada del Japón y las Hijas de María Auxiliadora presentes en Mozambique, como afirmó el Embajador mismo, mostrando interés hacia el trabajo educativo y expresando el deseo de apoyar proyectos también en las otras presencias de FMA.

Con el proyecto de las Escuelas Maria Mazzarello, la Comunidad Educativa y los barrios limítrofes de la ciudad de Pemba en los próximos meses podrán disponer de una amplia Biblioteca y del Aula Informática, como espacios de investigación y estudio, a favor de la formación de los jóvenes.

En el año en que el Instituto FMA celebra los 150 años de Fundación y los 70 años de presencia misionera en tierra mozambiqueña, las FMA no dejan de apostar por la educación y promoción de los jóvenes. La educación integral de niños/as, adolescentes y jóvenes es de hecho un signo de esperanza para este país, que lleva años en busca de la paz.

En la Fiesta de la Presentación del Señor y celebración de la Vida Consagrada, la visita del Embajador ha sido para las FMA de la Inspectoría motivo de agradecimiento a  la Providencia, que no falla si se  trabaja por y entre los más pobres.

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