Encuentro online de Pastoral Juvenil – CIAM

Roma (Italia) El 30 de junio de 2020 se llevó a cabo el encuentro online organizado por el Ámbito para la Pastoral Juvenil, con las Coordinadoras Inspectoriales de PJ y otras participantes, Hijas de María Auxiliadora y laicas, pertenecientes a las Inspectorías de la Conferencia Inspectorial África-Madagascar (CIAM).

El encuentro, de título “Dios está haciendo algo nuevo” (Cfr. Is 43,19), con el objetivo de hacer juntos una lectura creyente de la experiencia de la Pandemia de Covid-19 en la cual están inmersas las Comunidades Educativas de las FMA de la CIAM,  estuvo coordinado por sor Runita Borja, Consejera General para la Pastoral Juvenil, junto a las Colaboradoras del Ámbito.

La reunión se inició con la Oración Común por la Tierra y la Humanidad – propuesta por el Papa Francisco el 24 de mayo de 2020 con ocasión del quinto aniversario de la Encíclica Laudato si’ – pidiendo la ayuda para “mostrar solidaridad creativa en el afrontar las consecuencias de esta pandemia global” y el coraje “en el  abrazar los cambios en busca del bien común”, en un tiempo en que se hace la experiencia “de ser todos interconexos e interdependientes”.

A continuación, la escucha de la experiencia de cada Inspectoría dio la oportunidad de compartir y conocer cómo niños/as, adolescentes y jóvenes, padres y educadoras/es de las Comunidades Educativas de las realidades en que están presentes las FMA están viviendo el tiempo de lejanía de los ambientes educativos, de las iglesias y de los lugares de culto, a causa del lockdown determinado por la Pandemia de Covid-19. A este propósito, las Coordinadoras Inspectoriales de PJ junto a FMA y laicas de las respectivas Inspectorías, prepararon y compartieron una Presentación, siguiendo una línea de reflexión común.

La Covid-19 se está difundiendo en el Continente africano y, si bien el número de los contagios parece modesto respecto al de otros Continentes, como expresaron los participantes, “el virus está ya causando una creciente pandemia del hambre”, provocando un general empobrecimiento socio-económico y amenazando a las categorías más vulnerables, como las mujeres y las personas que viven de la economía de subsistencia. Para muchos adolescentes y jóvenes, sobre todo chicas, “el compromiso y el esfuerzo para alcanzar logros académicos y educativos parecen naufragar”

La situación de confinamiento incide pues en la misión educativa, impulsando a una conversión pastoral: en la lejanía de los jóvenes las Comunidades Educativas descubren la importancia de “hacerse cercanos”, más bien que de “hacer actividades” para ellos. Las participantes contaron gestos y modalidades llevadas a cabo para sensibilizar a la población y poner en marcha una acción preventiva contra la epidemia de Coronavirus, a menudo en colaboración con la Iglesia local y las Organizaciones civiles y gubernamentales. Algunas Inspectorías de la CIAM tienen además dispensarios, ambulatorios y clínicas que han permanecido abiertos funcionando en este tiempo, para continuar desarrollando el propio servicio socio-sanitario en el territorio.

Las palabras conclusivas de sor Runita, citando la Circular n° 999 de la Madre General de las FMA, fueron una llamada:

* a la fe, “la única verdadera fuerza. El Espíritu Santo nos escoge como sus colaboradores y colaboradoras. Estamos invitadas a profundizar el sentido de esta llamada”;

* a hacer experiencia de comunión y de colaboración, que de las Comunidades se extiende a todo el Instituto, a las Iglesias locales, a los contextos socio-culturales en los cuales actúa: “La llamada del Papa Francisco para un nuevo Pacto Educativo Global reavive el compromiso para y con las  jóvenes generaciones, tomándonos en serio el compromiso de cuidar la Casa Común, con el fin de asegurar el futuro de las nuevas generaciones”;

* a buscar caminos creativos para promover concretamente la sostenibilidad por medio de un estilo de vida según la Encíclica Laudato si’;

La frase de San Ignacio de Loyola, “Reza como si todo dependiese de Dios y actúa como si todo dependiese de ti”, un Ave María rezada en las diversas lenguas de las participantes y los saludos finales, pusieron fin al encuentro online.