Torino (Italia). El 8 de septiembre de 2018, en Turín, las Hijas de María Auxiliadora del Piamonte y del Valle de Aosta (IPI) han dado comienzo al año escolar y pastoral con una asamblea dirigida a todas las comunidades educativas.

La Asamblea tuvo como objetivo el lanzamiento del tema del próximo año, “Yo soy una misión”, tal como ha sido expresado en la Evangelii Gaudium del Papa Francisco:

“La misión en el corazón del pueblo no es una parte de mi vida, o un adorno que me puedo quitar; no un apéndice, o un momento entre tantos de la existencia. Es algo que no puedo erradicar de mi ser si no quiero destruirme a mí mismo. Yo soy una misión en esta tierra, y por esto estoy en este mundo. Hace falta reconocerse a sí mismo como marcado a fuego por tal misión de iluminar, bendecir, vivificar, levantar, sanar, liberar.”

Sor Elide Degiovanni, la Inspectora, se dirigió a los 400 presentes, entre los cuales las Directoras, las comunidades religiosas, los Directivos Escolares, los maestros y los educadores de las 40 comunidades de las dos regiones, diciendo:

“El año escolar y pastoral que vamos a iniciar será una gran oportunidad para continuar dirigiendo la atención del corazón a los jóvenes y para acoger con renovado impulso la misión educativa y evangelizadora que se nos ha confiado personalmente, pero siempre en comunión con nuestras comunidades educativas. El leitmotiv que acompañará el camino, “Yo soy una misión” #paralavidadelosotros”, es un fuerte estímulo a volver a las raíces más profundas de nuestra vocación, porque es Dios quien confía la misión y llama a cada uno a expresarla con el testimonio de la propia vida orientada a Dios para la vida de los otros.”

Las escuelas, los centros de formación profesional y los oratorios-centros juveniles llegan cada día a unos 10.000 niños, muchachos y jóvenes que se triplican pensando en las familias que están detrás de ellos.

El tema del año, “el servicio responsable”, sintetizado en el eslogan “Yo soy una misión”, fue desarrollado por el Salesiano don Silvio Zanchetta y después ejemplificado por las doce asociaciones de voluntariado presentes.

En el año dedicado al Sínodo sobre los jóvenes, el tema se propone formarlos a una espiritualidad del servicio responsable, a través de la cual, desde la edad de la infancia, cada uno se sienta proyectado hacia el otro en la solidaridad, insertándose en la óptica de una comunidad eclesial “en salida”, abierta a quien tenga necesidad de atención y de apoyo.

Al final de la mañana los participantes pudieron visitar las exposiciones de las Asociaciones para acercarse a las experiencias diversas y concretas de voluntariado.

 

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