Cascais (Portugal). Del 27 al 30 de diciembre de 2023, la Madre emérita del Instituto de las Hijas de María Auxiliadora, Sor Yvonne Reungoat fue invitada por la Inspectoría N. S. de Fátima (POR) para realizar un encuentro formativo sobre la Ecología integral. El encuentro tuvo lugar en el Colegio Nossa Senhora do Rosário de Cascais y participaron sesenta FMA de la Inspectoría.
Madre Yvonne llegó al aeropuerto el 27 e inmediatamente se dirigió a Fátima para un breve, pero intenso encuentro con la Virgen de Fátima. Por la tarde, en Cascais, las hermanas de la Comunidad la esperaban ansiosas: aunque no es la primera vez que Madre Yvonne las visita, para las hermanas de la Inspectoría POR es siempre una bendición. “Las superioras son el eslabón de la cadena que garantiza la continuidad del Carisma en las diversas partes del mundo. Son como ángeles que iluminan nuestro camino, nos animan en nuestro recorrido y nos guían en las estrategias más oportunas para los tiempos actuales”, señala Sor Ana de Jesús Carvalho.
El objetivo principal de su visita era ofrecer un momento formativo en el ámbito de la Ecología integral, a partir de las relaciones humanas. Siendo un tema de gran actualidad y urgencia, en respuesta a las insistentes peticiones del Papa Francisco, la Inspectoría portuguesa ha pensado en interpelar a la Madre emérita como experta, también por su experiencia al haber participado en el último Sínodo de los Obispos como facilitadora, como parte de un grupo de 85 religiosas/os y laicos de diversos sectores.
En el primer núcleo del curso, Madre Yvonne abordó los siete objetivos de la Laudato Si’, aplicados a la vida cotidiana. Estos son los temas: CUIDADO en la reciprocidad; CONVERSIÓN: el Espíritu Santo es una presencia transformadora; COMPASIÓN en un mundo herido; LLAMADA a ser “agradecidos”; CARISMA que genera fraternidad; CADENA DE ORO de las relaciones: “A ti te las confío”; CORAZÓN Oratoriano.
Los otros temas fueron tratados en la misma línea, ayudando a las FMA a asimilar e interiorizar la urgencia educativa de este tema con las nuevas generaciones.
El encuentro culminó con su testimonio sobre la experiencia sinodal, vivida en un clima de gran libertad, serenidad, respeto, cordialidad y gran participación. El mes estuvo marcado por el trinomio: comunión, misión y participación. Explicó que el proceso sinodal que involucra a todos, se desarrolla por etapas progresivas y tiende siempre a crecer y a ensancharse en círculos concéntricos. El trabajo no ha terminado, pero continuará, ya que se trata de un método que es ante todo un proceso en sintonía con los tiempos, para dar respuestas acordes a las exigencias concretas de cada época.
Con respecto a la ecología de las relaciones, todavía queda camino por recorrer, para transmitir, dar forma y contenido a los principios que deberían regular el comportamiento de los seres humanos, a partir de los más jóvenes. La tarea educativa es fundamental para sentar las bases de una mentalidad del CUIDADO de todo y para todos.
