Roma (Italia). Uno de los argumentos predilectos de la Beata Sor Eusebia Palomino Yenes, Hija de María Auxiliadora que vivió en España (1899-1935) y fue beatificada en Roma por Juan Pablo II el 25 de abril de 2004, era el amor de Jesús por todos los hombres, que ha salvado con su Pasión, y las Santas llagas de Jesús.

Desde niña, Eusebia practicó una ascesis muy rigurosa por amor de Quien “por todos murió, para que los que viven no vivan más para sí mismos, sino para Aquel que murió y resucitó por nosotros”.

A la edad de 11años tuvo un sueño con el Crucifijo, que puso la semilla de su amor ardiente a las Llagas de Cristo y su ardor al propagarlo con la siguiente plegaria: “Jesús  mío, perdón y misericordia por los méritos de vuestras santas Llagas”.

He aquí su narración extraída de la Positio sobre las virtudes de la Sierva de Dios Eusebia Palomino Yenes:

“Como un año después, y estando en la misma casa, soñé que iba por un camino y de pronto todo se iluminó, y vi un campo grande y extenso, en el cual había miles y miles de almas, de todas las clases, edades y condiciones. En medio de aquella multitud apareció un Crucifijo despidiendo rayos por cada una de sus cinco Llagas, de una claridad y luces encantadoras, que envolvías a todas las almas. De pronto el Crucifijo se empezó a elevar, y abrió sus divinos labios y me dijo estas palabras: “Éstas son las almas que se salvarán por medio de mis Llagas”.  Siguió elevandose, y trás Él, toda aquella inmensa multitud de almas, hasta que en gran altura las perdí de vista en el firmamento”.

El origen de esta oración se debe a una humilde monja en la Visitación de Chambery, que murió en olor de santidad el 21 de marzo de 1907. Es un Rosario o “Corona de las Santas Llagas de Nuestra Señora de la Misericordia”. El Señor se le apareció a esta monja, Marta María Chambón, y le hizo promesas, pero le dijo que, no ella, otro difundiría ampliamente esa Corona.

En toda España, de manera sorprendente, Sor Eusebia, obediente al sueño, empezó a difundir el Rosario a las Santas Llagas. Incluso las niñas que aún no sabían leer lo recitaban de memoria. Dijo que el Rosario de las Llagas y el de la Santísima Virgen salvarían al mundo. Tanto era su ardor por la salvación de España que, no sólo en Valverde, sino en la mayor parte de las ciudades y pueblos, hizo conocer esta devoción,  enviando paquetes de grabados con el Rosario de las Santas Llagas.

Don Francisco Arroyo, Capellán del Colegio de las FMA de Valverde, afirma sobre Sor Eusebia: “Tenía una ardiente devoción por la Pasión del Señor; especialmente por las Llagas. Las personas que la conocían bien dicen que era ejemplar cuando practicaba el ejercicio diario del Vía Crucis.

En el 150° aniversario de la Fundación del Instituto de las Hijas de María Auxiliadora, no se puede dejar de recordar que la devoción a la Pasión del Señor era sentida fuertemente por Madre Mazzarello: “La devoción a la Pasión de Jesús fue considerada por ella, y con razón, como un medio eficaz para evitar el pecado y encenderse de amor por el Divino Maestro” (F. Maccono, Lo spirito e le virtù di S. Maria D. Mazzarello).

También Don Bosco decía: “Mi afecto por vosotros (jóvenes) está fundado en el deseo de que he de salvar vuestras almas que fueron todas redimidas por la Sangre preciosa de Jesucristo” (Consejos espirituales en las cartas de Don Bosco a niños y a jóvenes).

Finalmente, para San Francisco de Sales, cuyo 400 aniversario de la muerte se celebra en 2022, la Pasión “es la verdadera escuela del amor divino; el más dulce y el más fuerte motivo para animar nuestra piedad”.

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.