Baucau (Timor Oriental). Del 10 al 13 de agosto de 2023, en el ambiente de la Jornada Mundial de la Juventud de Lisboa, en el Colegio S. Antonio de los Salesianos de Don Bosco de la Visitaduría Santo Callisto Caravario de Timor Oriental (TLS), se realizó el Foro del Movimiento Juvenil Salesiano sobre el tema: “Los jóvenes como levadura en la familia humana hoy”.
Los jóvenes participantes – animadores de los oratorios, de las Escuelas Salesianas, de las Asociaciones – sumaron alrededor de 600, incluyendo la presencia de algunos representantes de las tres diócesis y algunos miembros de los Grupos de la Familia Salesiana, sobre todo Salesianos Cooperadores, Exalumnos, Salesianos de Don Bosco y las Hijas de María Auxiliadora.
También estuvieron presentes los Delegados para la Pastoral Juvenil, Don Nelson Gonsalves Soares, SDB y Sor Julia Fernandes, FMA que regresaban de la JMJ 2023, junto a cuatro jóvenes, que luego aportaron el testimonio de su experiencia.
El Foro se abrió en la tarde del 10 de agosto con palabras de bienvenida del Superior de la Visitaduria, Don Anacleto Pires, SDB y Sor Alma Castagna, FMA, Inspectora de la Inspectoría S. Maria D. Mazzarello (TIN) y con la Celebración Eucarística.
El primer día, los jóvenes se dividieron en dieciséis grupos para la formación en cuatro áreas temáticas: metodología catequética, identidad de los jóvenes en una sociedad democrática, protagonismo juvenil salesiano y espiritualidad juvenil salesiana. Por la tarde, los jóvenes tuvieron una experiencia de apostolado visitando ancianos y personas necesitadas. Este momento fue muy significativo para los jóvenes, quienes a su regreso compartieron la gran alegría que experimentaron al haber podido rezar con ellos, tenderles una mano y sobre todo alentarlos y escucharlos. En particular, retomaron una parte de la exhortación apostólica Christus vivit, sobre la cultura del encuentro entre jóvenes y mayores, destacando cuántas cosas se pueden aprender de su vida y experiencia.
“La autenticidad e integridad de la vida y misión de los animadores” y “Ser fermento en la sociedad con una política de bien común” fueron los dos temas abordados al día siguiente. El primer tema fue presentado por una pareja de Exalumnos, quienes compartieron su vida conyugal y de fe a partir de lo aprendido durante su tiempo de formación en las realidades salesianas. Luego invitaron a los jóvenes a aprovechar la propuesta educativa que ofrece el MJS y la Iglesia, que ama a los jóvenes y camina con ellos para que sean buenos cristianos y honestos ciudadanos y crezcan en su relación con el Señor. Los novios testimoniaron los elementos esenciales de la Espiritualidad Salesiana – oración diaria, sacramentos, confianza en María, visita al Santísimo Sacramento – concluyendo que esta experiencia de fe es el camino hacia la santidad y les ha ayudado en el camino de la fidelidad en el matrimonio y en la educación de los hijos.
El segundo tema fue presentado por el Don Aderito Da Costa, SDB, quien acompañó a los jóvenes a profundizar en cómo ser levadura en la sociedad orientándose hacia el bien común y siguiendo los consejos de santidad de Don Bosco a Santo Domingo Savio: hacer cumplir bien el deber, ser alegre y hacer el bien a los demás.
Por la tarde, los animadores tuvieron la oportunidad de aprender diferentes juegos didácticos útiles para la animación en los oratorios. Por la tarde hubo un intenso momento de celebración penitencial con la oración de Taizé. La jornada finalizó con las Buenas Noches del Inspector y con el Festival cultural, en el que los participantes demostraron sus talentos.
El último día se compartió la experiencia de la JMJ en Lisboa, con las jornadas previas en la Diócesis de Évora y el SYM Day en Estoril, Lisboa. Los jóvenes representantes del MJS – María, Alcina, Salvador y Joanzinho – compartieron su peregrinación de fe, amistad, alegría y fraternidad. De cada uno de ellos brotó la alegría de haber podido vivir una experiencia única e intensa de la Iglesia universal y del carisma salesiano, después de haber superado tantos desafíos, incluidos los económicos, y haber experimentado la Providencia de Dios y la protección de Nuestra Señora (ver Concierto de recaudación de fondos).
Uno de los jóvenes expresó su agradecimiento a Dios por haber podido participar por primera vez en una JMJ y por haber caminado en fraternidad con los jóvenes que profesan la misma fe en el Señor Jesús, luego de esta experiencia decidió acoger el apostolado como animador del oratorio y ayudar a sus coetáneos a ser valientes en el camino, siguiendo las palabras del discurso del Papa Francisco durante la Vigilia en el Parque Teju : “Camina y, si te caes, levántate; caminar con una meta; hacer ejercicio todos los días de la vida. En la vida nada es gratis, todo se paga. Sólo una cosa es gratis: ¡el amor de Jesús! Por eso, con este don gratuito que tenemos -el amor de Jesús- y con el deseo de caminar, caminemos en la esperanza, miremos a nuestras raíces y sigamos adelante, sin miedo. No tengáis miedo”.
Los demás participantes también compartieron su agradecimiento por haber conocido a tantos jóvenes de diferentes colores, idiomas, culturas, pero con la misma fe y el gran deseo de escuchar y ver al Santo Padre. “El encuentro con el Papa fue como encontrar la persona de Jesús. El día del Vía Crucis, el Papa pidió abrir las ventanas del alma, pensar sin miedo en el propio sufrimiento, caminar con Jesús porque Él es el camino al Padre”, testificaron.
Este último día del Foro fue un momento eclesial a todos los efectos, con la calurosa acogida del nuevo Obispo de Baucau , Mons. Leandro Maria Alves, quien por primera vez se reunió con los jóvenes del MJS y concelebró la Eucaristía con los salesianos. En su homilía profundizó en el tema, dando consejos sobre cómo ser buena levadura para los demás.
El éxito del Foro se encontró en el testimonio del Carisma, en espíritu de sinodalidad, con alegría salesiana. En la alegría del encuentro con el Señor -en los momentos de oración, en los sacramentos de la confesión y la Eucaristía, en los momentos de formación y servicio y en la fiesta cultural- los participantes tuvieron la oportunidad de expresarse con sus talentos y así enriquecer el tiempo vivido juntos.
