Bogotá (Colombia). El 11 de enero de 2022 las Hijas de María Auxiliadora de las Inspectorías de Bogotá, N.S. de la Nieve  (CBN) y  N. S. del Rosario di Chiquinquirà (CBC), celebraron el 125º aniversario de la presencia al servicio de los niños y de los jóvenes colombianos (1897 – 2022).

Las FMA recordaron con gratitud la llegada de las primeras siete FMA a Bogotá el 11 de enero de 1897: sor Brigida Prandi, sor Giuseppina Festa, sor Rosario Morillo, sor Modesta Ravasso, sor Serafina Ossella, sor Angiolina Tarrone y la novicia Herminia Pagnini que, ocupándose inicialmente de los más pequeños, han dado vida a la obra que se ha difundido en toda Colombia.

En la Capilla de la Comunidad María Auxiliadora de Bogotá, de la Inspectoría CBC, Don John Jairo Gómez Rúa, Inspector de la Inspectoría San Pedro Claver  Salesianos de Don Bosco, presidió la Celebración Eucarística concelebrada por otros sacerdotes salesianos. Estaban presentes la Inspectora de la Inspectoría CBN, sor Cecilia Camacho, la Inspectora de la Inspectoría CBC, sor Edith Franco Ruiz, varias FMA de las dos Inspectorías y algunos miembros de la Familia Salesiana.

En la homilía, el Inspector recordó a las FMA: “125 años de fidelidad son al mismo tiempo una llamada a una verificación para comenzar de nuevo … como en los orígenes de Mornese, en Colombia. La fidelidad carismática llevada adelante con tanto entusiasmo durante 125 años exige cada día más compromiso y renovación”.

Don John después invitó “en nombre de Don Bosco y de Madre Mazzarello”, a asumir la historia que queda por escribir teniendo en la base de la fidelidad una actitud de conversión: “Este camino se hace de la mano de Dios, como creyentes que saben escuchar su voz y desde el discernimiento correcto entienden su llamada. (…) Seguimos siendo creíbles, significativos y fructíferos, no sólo por lo que hacemos, sino por lo que somos”.

Durante la Celebración se presentó un cuadro que figura la Basílica de María Auxiliadora de Turín. En los ladrillos que componen la fachada están escritos los nombres de las FMA de las dos Inspectorías, como signo de ser un monumento vivo de gratitud de Don Bosco a María Auxiliadora.

La Jornada de fiesta, culminada con un sencillo momento fraterno en el espíritu de familia salesiano, fue para las FMA la ocasión de renovar el deseo de continuar siendo portadoras del Carisma en cada Comunidad de Colombia y, a ejemplo de las primeras hermanas misioneras, ser “generativas de vida”, como ha pedido el Capítulo General XXIV.

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