Treinta y Tres (Uruguay). Del 11 al 14 de diciembre de 2020, los jóvenes del Movimiento Juvenil Salesiano (MJS) del Centro Educativo Nuestra Señora de Treinta y Tres, donde hace 40 años están presentes las Hijas de María Auxiliadora de la Inspectoría Inmaculada Concepción (URU), vivieron un campo misionero para compartir, en este tiempo de pandemia de Covid-19, su fe y su esperanza con las familias de la vecina localidad de El Oro.
Los miembros de la Juventud Misionera Salesiana, con los animadores de los Oratorios Laura Vicuña y San Benito, acompañados de las FMA y de los educadores, contactaron con la catequista local y el párroco, responsable de la pastoral, que acogieron con entusiasmo la iniciativa. Los jóvenes implicaron a sus propias familias, para que los autorizaran a participar y para el traslado cotidiano en auto, en el respeto a las disposiciones sanitarias.
Cada día, antes de partir para la misión a El Oro, los jóvenes, con los educadores y con las FMA – sor Erica Mora Pereira y sor Adriana Silva – se encontraban para prepararse a través de un tiempo de reflexión y de plegaria personal y de grupo, que terminaba con la Celebración Eucarística.
Los jóvenes misioneros recorrían, después, todo el territorio, compartiendo su testimonio, invitando a las personas a reunirse en la plaza de la localidad para participar en algunas actividades pastorales y de animación, como por ejemplo preparar y rezar la corona de Adviento y hacer los belenes para llevar a la familia. Algunos jóvenes, con una FMA, iban a rezar y cantar en el patio de las familias que lo deseaban.
Esta iniciativa ha dejado a los jóvenes y a los laicos de esta Comunidad Educativa con una alegría profunda, convencidos de que su fe y esperanza en Jesús se han reforzado y multiplicado en este ejercicio de compartimiento con los otros. Por esto han decidido asumir el compromiso de continuar acompañando esta pequeña comunidad del campo de Treinta y Tres.
Terminada esta experiencia, un grupo de jóvenes misioneros, junto a sor Erica, volverán a visitar la localidad de El Oro, para proporcionar a algunas familias que lo han pedido textos y material para profundizar la fe.
¡Qué lindo grupo! Jóvenes abriendo caminos!