Roma (Italia). El 17 de febrero de 2022, en la Pontificia Facultad de Ciencias de la Educación «Auxilium» de Roma, se llevó a cabo el encuentro de presentación del volumen Rostros de un mismo carisma. Salesianos e Hijas de María Auxiliadora en el siglo XX”, a cargo de Francesco Motto  y  Grazia Loparco (ACSSA, Studi 10, Roma LAS 2021, 899 pp.), transmitido en directo online.

La Directora, Pfra. Piera Ruffinato, FMA, presentó el encuentro – incluido entre las iniciativas para el 150º de fundación del Instituto de las Hijas de María Auxiliadora (1872-2022) y con vistas a las Jornadas de la Facultad que se celebrarán en septiembre de 2022 – agradeciendo a los comisarios la publicación de este volumen hecho de rostros recogidos y conservados en las biografías. Sor Piera recordó la presentación del volumen de Madre Yvonne Reungoat, Madre general emérita del Instituto FMA:

“El camino de investigación está dirigido a indagar en la presencia de personas que han marcado la historia del carisma sin hacer nada excepcional, solo tratando de lograr lo que podría convertirse en una fuerza educativa de calidad para los jóvenes a los que fueron enviados. Estas personas realizan también hoy la llamada a vivificar el mundo juvenil y las culturas, para que sean lugares de felicidad para los jóvenes. (…) Es un prisma que refleja una única luz, pero la refracta en muchos colores y formas”.

Don Francesco Motto, Salesiano de Don Bosco, Presidente de la Asociación de Amantes de la Historia Salesiana (ACSSA), presentó brevemente los 48 perfiles de SDB y FMA contenidos en el volumen, especificando que no se trata de salesianos/as del pasado, más bien del futuro, por haber actualizado la misión salesiana de manera innovadora, significativa, original. Son sacerdotes, coadjutores, monjas de origen mayoritariamente popular, con roles no superiores, en diferentes países y situaciones, que en el siglo 21, con gran libertad de espíritu, han emprendido iniciativas a menudo audaces.

Don Motto también mencionó las dificultades para encontrar fuentes biográficas, tratándose de personajes “menores”, con el redescubrimiento de fuentes primarias, de archivos locales y testimonios orales. A continuación, cedió la palabra a los cuatro ponentes que presentaron los perfiles elegidos:

Sor Iside Malgrati (1904-1992), FMA de Lombardía (Italia), fue presentada por la Pfra. Rosangela Siboldi, FMA, Profesora de Teología Pastoral en el «Auxilium», que valoró la investigación muy cuidada por sor Loredana Corazza, FMA de Lombardía. La definió como una FMA “abierta a la modernidad”, por la capacidad de comprender los signos del tiempo y la evolución del mundo juvenil, por la actitud de relacionarse a distintos niveles con las alumnas, con los representantes de las instituciones locales, con los exponentes gubernamentales, con los emprendedores y los profesionales, con visión de futuro, determinación y tenacidad.

Sor Iside se distinguió por una misión educativa amplia y multiforme, con tres experiencias significativas: la revista “Primavera” como instrumento de educación cristiana y social para las jóvenes, cuyo primer número salió el 31 de enero de 1950; la revista “Da mihi animas”, nacida en abril de 1954 como instrumento formativo para los sacerdotes, las hermanas y los laicos comprometidos en los oratorios; el proyecto, la realización y la gestión del Instituto Maria Mazzarello en Cinisello Balsamo (Milán), un complejo escolar y profesional para la educación de la juventud femenina con opciones educativas innovadoras.

Sor Anna Maria Coppa (1891-1973) fue presentada por sor Karen del Pilar Vivanco Cerda, FMA estudiante del Curso de Espiritualidad, sobre la base de la biografía escrita por sor Sandra Armijos, FMA del Ecuador. Nacida en Casale Monferrato (Alessandria, Italia), llegó a Ecuador en el 1935 y fue fundadora de la primera Casa de las FMA en Quito, la capital, y de la primera Escuela Normal católica del Ecuador para la formación de las maestras. En un contexto laicista y de pobreza educativa y económica, sor Anna Maria respondió a los desafíos del tiempo con audacia, firmeza, inteligencia y amabilidad, para dar una aportación significativa a la formación de las jóvenes y a su inserción en la vida social.

De Sor Nancy Pereira (1923-2010), la primera FMA del Kerala (India), habló la Pfra. Josmy Jose, FMA, basándose en la investigación realizada por sor M. Sahaya Sangitha Rani. Son Nancy desde pequeña  se conmovía por la miseria de la gente,  y la generosidad, aprendida de sus padres, la empujará a la elección vocacional y a la acción, con extraordinarias realizaciones e innumerables proyectos e iniciativas para prevenir la pobreza y la miseria por medio de la educación. “Mi vocación es servir a los pobres” era su lema. Mujer emprendedora y con mentalidad de empresa, introdujo el microcrédito para las mujeres de los slum (barrios pobres) de Bangalore, dándoles la posibilidad de empezar una actividad de trabajo digno y autónomo.     Era un tipo carismático y comprometido, como para generar apoyo y solidaridad. Sor Nancy dejó un legado indeleble en la India y en el Instituto. Los edificios y estructuras que han visto su incansable trabajo son un testimonio de su intervención al servicio total de los pobres.

Sor Gertrudes da Rocha (1933-2017) FMA portuguesa misionera en Mozambique, fue presentada por la misma autora de la investigación, sor Inácia Eugénio Chaquisse, FMA de Mozambique, histórica y estudiante del Curso de Espiritualidad. En los años del colonialismo, con la separación de negros y blancos, y después del marxismo, con la confiscación de las instituciones educativas y la prohibición de hablar de religión, Sor Gertrudis supo llegar a todos los jóvenes con creatividad y entusiasmo, a veces en contra del parecer de las hermanas. En los primeros años Namaacha tomó la iniciativa de abrir un Oratorio dominical para las indígenas   mozambiqueñas, llevándolas a los bosques cercanos con una pintura de María Auxiliadora y una de Don Bosco. Durante el marxismo, recuperó las máquinas para enseñar a las madres solteras a trabajar en la industria de la ropa de punto. También se distinguió como tesorera, siempre proporcionando los bienes y el dinero necesarios, incluso en tiempos difíciles. Llevó a cabo su misión de manera alegre, activa y responsable en la inculturación del carisma salesiano en el contexto local.

Sor Grazia Loparco, al final, agradeció el momento vivido como Instituto: “Para nosotros cae en el 150ª y habiendo recordado a cuatro figuras que han trabajado en cuatro continentes, como los cuatro puntos cardinales. Ello dice que el carisma salesiano se ha extendido verdaderamente por todo el mundo gracias a personas sencillas que han sabido atreverse con prontitud, gran audacia, gran amor. Es hermoso que los miembros del Instituto pongan el foco en estas figuras que tienen tanto que decir y dar en términos de herencia salesiana”.

Vídeo del encuentro

1 COMENTARIO

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.