Roma, Italia). El 24 de septiembre de 2023 en Roma, en la Pontificia Facultad de Ciencias de la Educación “Auxilium”, las comunidades que componen la Visitaduría María Madre de la Iglesia (RMC) dieron la bienvenida a la nueva Superiora, Sor Jessica Salvaña.

De origen filipino y procedente de la Inspectoría María Nuestro Auxilio de Camboya y Myanmar (CMY), Sor Jessica sucede a Sor María del Carmen Canales Calzadilla, primera Superiora que dirigió la “muy joven” Visitaduría, erigida canónicamente el 8 de octubre de 2017. La bienvenida tuvo lugar en el marco de la Asamblea de la Visitaduría, con la presencia de todas las FMA de las cinco comunidades.

Sor Jessica llegó por la mañana acompañada de la Vicaria General del Instituto de las Hijas de María Auxiliadora, Sor María del Rosario García Ribas. Todas las hermanas la esperaban en el patio, frente a la Madonna dell’Accoglienza, para darle la bienvenida y un abrazo de fraternidad.

Después fue acompañada hacia la entrada de la Facultad, donde cuatro hermanas, representantes de los cuatro continentes de origen de las FMA, le dieron cada una un signo de bienvenida, símbolo de la internacionalidad de la Visitaduría RMC: una capulana de África, un precioso pañuelo de Asia, hermosas flores de América y una escultura de madera de olivo de Europa y Medio Oriente.

La Vicaria General pronunció las palabras del Decreto de nombramiento como Superiora de la Visitaduría, subrayando la fecha del 24 de septiembre como fecha oficial del inicio de su servicio. Un saludo a María en la sala del Auxilium selló este momento intenso y emotivo.

La Santa Misa presidida por Don Joyce Thonikuzhiyil, salesiano de Don Bosco, estuvo animada por cantos en diferentes idiomas y oraciones que transmitían la idea de abrazar al mundo entero.

Después de la Santa Misa se sucedieron todos los momentos previstos en el programa de la Asamblea, involucrando inmediatamente a Sor Jessica en la vida de la Visitaduría. Sólo al final, después de un saludo de los Salesianos Cooperadores, Sor Jessica se dirigió a todos los presentes, comenzando con estas expresiones:

Me alegro plenamente en el Señor, mi alma se alegra en mi Dios (Is 61,10). ¡Estas palabras del libro de Isaías son las mismas que me vienen a la mente en este momento, viéndoos en esta asamblea! ¡Mirad a la hermana sentado a vuestro lado! ¿No es tal vez un regalo de Dios a nuestra Visitaduría? Esto, de hecho, es un motivo para alegrarnos y elevar nuestra alabanza al Señor, al ver el rostro intercultural e intergeneracional de nuestra Visitaduría. “Hermanas no es casualidad que cada una de nosotras se encuentre en esta Visitaduría. Ninguna de nosotras eligió estar aquí. Es Dios quien quiso que vivamos juntas en esta Visitaduría”.

Después, Sor Jessica instó a ser personas significativas, dando lo mejor de sí mismas en estilo sinodal. “La palabra ‘sínodo’ no debe ser un eslogan de moda” – prosiguió – sino “un estilo de vida encarnado en nuestra vida cotidiana. También hubo una referencia a ser generadores de vida: “Cada una con su contribución única hace que esta Visitaduría sea ‘generadora de vida’. Todas estamos implicadas en este camino juntas… ser generadoras de vida, ante todo las unas para las otras y luego para los jóvenes que nos han sido confiados”. La nueva Superiora transmitió mucha esperanza y confianza a las hermanas, garantizando un servicio realizado con sencillez, escucha y atención a la voz del Espíritu Santo.

La Asamblea cerró con el canto a María “Dijiste sí”, para volver a agradecer de corazón a Sor Jessica por su disposición a ser instrumento en las manos de Dios, en un servicio generoso en la Visitaduría RMC.

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