Bogotá (Colombia). Del 28 de junio al 24 de julio de 2021 en Bogotá, en la Casa Inspectorial de la Inspectoría Nuestra Señora de la Nieve (CBN), once FMA Junioras de las Inspectorías de la Conferencia Interinspectorial de las Naciones Bolivarianas (CINAB) vivieron la experiencia formativa del Segundo Noviciado.
El tema del Encuentro era “El dinamismo de la fidelidad”, a la luz del texto evangélico sobre la vid y los sarmientos del Evangelio de Juan (Jn 15, 1 -18).
El objetivo de esta etapa formativa es la confrontación con los elementos de la identidad de la Hija de María Auxiliadora, a través de la relectura del camino vocacional a la luz de la Palabra y del Carisma.
La experiencia se vivió en un clima de gozo y fraternidad, de compartir sencilla y serenamente lo que cada Juniora ha construido en los primeros años de Profesión, en que cada momento ha sido vivido con intensidad y gratitud a Dios y a las hermanas de la Comunidad.
Las Junioras trabajaron sobre tres núcleos:
1°núcleo: Identidad. “Yo soy la verdadera Vid y mi Padre es el Viñador”
Por medio de la Lectio Divina del texto de Juan, don Hernán Cardona, Salesiano de Don Bosco, evidenció la importancia de la Vid en el contexto bíblico y presentó la Eucaristía como fuente y culmen de la vida y de la misión de la FMA. Sor María Eugenia Rodríguez, FMA, Coordinadora del Segundo Noviciado, presentó la identidad carismática a la luz de las Constituciones, con la invitación a repasar el camino emprendido en los primeros años de Profesión y profundizar los rasgos característicos de la Hija de María Auxiliadora.
2° Nucleo: Consejos Evangélicos. “Todo sarmiento que da fruto, lo poda para que dé más fruto”
En el 2º núcleo se profundizaron los Consejos Evangélicos para asumir radicalmente la vida consagrada. Sor Gladys García, FMA, Maestra de las Novicias, presentó la dimensión carismática de los votos en las Constituciones, subrayando el seguimiento de Jesús casto, pobre y obediente, como principio unificador de la respuesta al amor de predilección de Dios que llama. La psicóloga Ana Leonilde Martínez presentó la dimensión psicológica a través de la confrontación con la propia vida, con la realidad de la Consagración y con las Bienaventuranzas.
3° núcleo: la oración. “El que permanece en mí como yo en él, ése da mucho fruto” La reflexión del 3º núcleo se centró en el “ser” y en el “hacer” de la Hija de María Auxiliadora. Don Martín Sepúlvedam, de la Sociedad de San Pablo (SSP), propuso el tema de la oración como fundamento de la vida cristiana, a la luz del Catecismo de la Iglesia Católica. Sor Emily Cruz, FMA, Asistente de las jóvenes del Período de Verifica y Orientación (PVO) y de las Postulantes, compartió la experiencia de la filialidad, que ayuda a reconocer la presencia de María en el Instituto FMA y en la historia de cada una. Sor Cecilia Camacho, Inspectora de la Inspectoría CBN, presentó la dimensión carismática de la oración y de la sinodalidad, como paradigma de la vida comunitaria, recordando algunos trazos del estilo educomunicativo y sinodal de Madre Mazzarello.
Los Ejercicios Espirituales vividos en la Casa Villa María fueron la ocasión de transformar en compromisos concretos lo profundizado en cada núcleo. Don Luis Bernardo Mur, SDB, acompañó a las Junioras profundizando el tema: “La Profesión Religiosa como respuesta definitiva al don de la fidelidad de Dios”, retomando algunos artículos del Derecho Canónico y de las Constituciones y poniendo de relieve la presencia de la Gracia en el camino de la Iglesia, del Instituto FMA y de la historia personal.
Las FMA Junioras, agradecidas por la oportunidad formativa del Segundo Noviciado, se comprometieron a vivir y poner en práctica lo recibido, para ser auténticas Hijas de María Auxiliadora enraizadas en Cristo, felices de pertenecerle y de vivir en Comuni8dad, caminando juntas y buscando el bien de los jóvenes y de las personas confiadas a ellas.
