Roma (Italia). La Madre General del Instituto de las Hijas de María Auxiliador, Sor Chiara Cazzuola, con la Circular n. 1015, en el camino de celebración del 150° aniversario de la Fundación del Instituto y en continuidad con el Capítulo General XXIV, retoma la invitación a ser comunidades generativas.

En el itinerario post-capitular, el icono de Caná y las palabras de María a los sirvientes: “Haced lo que Él os diga” (Jn 2,5) continúa acompañando a las Hijas de María Auxiliadora en el compromiso de ser en la contemporaneidad “presencia” viva que genera vida.

Un carisma generativo

El de la generatividad”, observa Madre Chiara, “es un tema actual y fecundo”, en un tiempo marcado por la experiencia de la pandemia, en el cual emerge “una gran necesidad de ser regenerados”, y en el Instituto FMA, en el que se advierte “una fuerte exigencia de generatividad”.

La generatividad está en el origen de la historia del Instituto FMA: es María Auxiliadora quien la ha querido, generado y guiado en el tiempo y a los 150 años de la fundación continúa generándolo. Don Bosco y Madre Mazzarello fueron acompañados por María, implicaron a los/las jóvenes en su proyecto  y dieron vida a comunidades misioneras en la Iglesia y en la sociedad:

“Dejémonos contagiar aún por su santidad simpática y fascinante para ser comunidades generativas, capaces de desvelar la frescura original de la fecundidad vocacional del Instituto. Quien genera valoriza y potencia los recursos de cada uno, incluso los escondidos”, es la invitación de la Madre.

Es la comunidad, el primer lugar en que se aprende “incluso con las limitaciones y la fragilidad de cada una”, a acompañarse recíprocamente y a acompañar a las/los jóvenes a descubrir y a responder al proyecto de Dios en su vida, a vivir en comunión y a apoyarse en la fidelidad (cf C 49), a reconocer la voluntad de Dios y a acogerla en los signos presentes en las hermanas, hermanos y situaciones (cf.C 30).

Considerando la realidad diaria de la vida consagrada, llamada a un renacimiento evangélico-carismático, “el primer compromiso decisivo”, dice Madre Chiara, “es despertar la pasión por Jesús y la pasión educativa”.

La calidad de la vida del Instituto y la fecundidad educativa están ligadas a la formación, en la cual es necesario invertir con más determinación y de la que depende la solidez de la respuesta vocacional.

Para ser una presencia significativa

Para ser generativas como María – sugiere Madre Chiara – es importante que cada FMA y juntas, como Comunidad, se verifique si de verdad Dios está en el centro del corazón, de las opciones, de toda la vida y misión. “Y cuando Dios está en el centro de la vida, de las comunidades, de la misión, nuestra presencia se hace capaz de irradiar luz y alegría”.

La  Madre recuerda algunos ejemplos carismáticos que pueden ser de ayuda para encontrar “el secreto de la fecundidad educativa”: en la vida de Madre Mazzarello, “una mujer que, sólo con su “estar”, revelaba a Dios porque estaba habitada por Él y vivía constantemente en Él”; en la mística del “da mihi animas” y en la ascesis del “cetera tolle”,  preciosa herencia de Don Bosco y de San Francisco de Sales.

Cita además la carta escrita por Don Bosco el 24 de mayo de 1886, como apéndice a las Constituciones y Reglamentos del Instituto de las FMA, en que el Fundador delinea para las FMA “un camino de radicalidad evangélica, condición esencial para poder ser comunidades vocacionales”.

Las Actas del CG XXIV recuerdan a las Comunidades Educativas que han de asumir la cultura vocacional para ayudar a los/las jóvenes a descubrir y a vivir el propio proyecto de vida. Es una responsabilidad – subraya Madre Chiara – que para las FMA es “expresión de fidelidad al dinamismo profético del carisma”, y es esta responsable fidelidad la que “podrá hacer verdaderamente generativas nuestras comunidades en la Iglesia y en los distintos contextos donde Dios nos pide trabajar”.

Madre Chiara Cazzuola termina la Circular recordando, como ya ha sido comunicado a las Inspectoras de la Vicaría general, sor María del Rosario García Ribas, que la Fiesta de la Gratitud mundial, organizada por la Inspectoría piamontesa Maria Ausiliatrece (IPI), se realizará en Turín, Mornese, Nizza, y tendrá como hilo conductor la presencia de María, en sintonía con el CG XXIV.

Augura finalmente “que vivamos la Cuaresma como un tiempo de relanzamiento en el camino de la santidad, disponibles a “caminar con corazón grande y generoso (C 47,12)”.

Circular n. 1015

2 COMENTARIOS

  1. Muy querida Madre Chiara, muchas gracias por la circular, realmente muy en sintonía con el Capítulo General, el desafío es para cada una “generadoras de vida”, Don Bosco en su carta del 24 de mayo de 1886, claramente es explícito al delinear que Hermanas necesita el Instituto para responder a las necesidades que siempre son actuales. Madre…Gracias por recordarnos!!!
    Finalmente todo se verá al final de la vida… cuando Dios nos llame a su presencia. ¡Qué estemos preparadas”. Dios le bendiga Madre!!! … Le acompaña mi oración en su misión.

  2. Grazie Madre Chiara per questa bella e significativa circolare , proprio pos capitolo abbiamo avuto una trasmissione del capitolo come la nostra Ispettoria e molto estensa ancora ne avremmo tre momenti in altri stati,,,,

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.