Turín (Italia). El 29 de julio de 2023 en Turín, en la Basílica de María Auxiliadora, cinco jóvenes del Noviciado Internacional María Auxiliadora de Castelgandolfo (Roma) y Sor Teresa Valsè Pantellini de Roma, emiten su Primera Profesión Religiosa en el Instituto de las Hijas de María Auxiliadora.
Las jóvenes FMA pertenecen a la Inspectoría María Auxiliadora (IPI), Santa María Mazzarello (ITV) y San Juan Bosco (SLK), mientras que otras tres compañeras, de la Inspectoría María Inmaculada (CEL), la Inspectoría de Notre-Dame des Nations (FRB) y la Inspectoría de Nuestra Señora de Jasna Góra (PLJ), harán su Primera Profesión los días 6, 8 y 14 de agosto en sus respectivas Inspectorías.
La Celebración Eucarística, animada en el canto y la liturgia por el Coro del Oratorio Salesiano de Cuneo, fue presidida por el P. Stefano Martoglio, Vicario del Rector Mayor, y concelebrada por varios Salesianos de Don Bosco y sacerdotes que acompañaron a las jóvenes en su camino.
La Superiora General, Madre Chiara Cazzuola, recibió los votos y acogió a las nuevas profesas en el Instituto FMA. También estuvo presente la Consejera para la Formación, sor Nilza Fátima de Moraes, las Inspectoras, familiares, jóvenes y las FMA de las Inspectorías de las candidatas.
En su homilía, el Celebrante se dirigió sobre todo a las profesas, reflexionando sobre las lecturas propuestas por la liturgia del rito, tomadas del Libro del Deuteronomio, de la Carta a los Filipenses y del Evangelio de San Mateo. Don Martoglio destacó tres expresiones:
Escucha: La página de Deuteronomio comienza con una forma antigua y siempre nueva de expresar la esencia misma de nuestros votos religiosos: amarás al Señor tu Dios… El Señor es tu Dios, tu alegría, el centro de tu vida. Escucha, Israel: la escucha es la fuente de la obediencia, obedece esta palabra de Dios. Dios dice: Tu fidelidad viene de mi fidelidad. Y si me escuchas, habla de ello. El Deuteronomio nos recuerda que todos hablan de las cosas que aprecian.
Atracción por Dios: Dios me atrae, corro hacia Él y todo lo demás es basura. Su presencia es más fuerte que cualquier cosa que me pueda pasar, por eso no dejo de correr hacia Él deseándolo. Mantén mi presencia ante tus ojos, para que ilumine tus decisiones.
Esperanza y serenidad: La esperanza y la serenidad florecen en esta presencia de Dios: estos dones provienen de la fe. ‘Yo os cuido’: Don Bosco y nuestros Fundadores expresaron esta presencia de Dios en una palabra espléndida: la Providencia de Dios, que está a vuestro lado y sabe de lo que tenéis necesidad”.
El Vicario General concluyó su homilía con un deseo: “Que el Señor sea vuestra esperanza y vuestra serenidad, porque vuestro testimonio será vuestra serenidad, vuestra esperanza, vuestra humanidad, que hablará de vuestra fe”.
Después de la homilía, comenzó el Rito de la Profesión Religiosa. Las Maestras, Sor María Giovanna Mammarella y Sor Luisa Menozzi, presentaron las candidatas. En respuesta al Amor del Padre, cada una leyó la fórmula de la Profesión, expresando la donación a Dios y a los jóvenes y el compromiso de vivir los consejos evangélicos según las Constituciones del Instituto FMA.
Madre Chiara Cazzuola acogió a cada Profesa y entregó las Constituciones y el Crucifijo, signos de compromiso y pertenencia. Finalmente, las nuevas profesas se encomendaron a María con el canto “Oh María Virgen poderosa”.
Entre los agradecimientos finales, las jóvenes FMA expresaron su agradecimiento al P. Stefano Martoglio, a Madre Chiara Cazzuola, a las Maestras y a todos los que las han acompañado.
Madre Chiara también agradeció a los presentes, especialmente a los padres y a todas las personas que han seguido el camino de estas jóvenes, porque “encontrar personas que ayuden a los jóvenes a orientarse hacia un proyecto de vida y a encontrar su lugar en la vida es la misión más grande y es el regalo más grande que les podemos hacer”.
Concluyó dando gracias a Dios por el don “de estas cinco maravillosas chicas que se han convertido en Hijas de María Auxiliadora” y dirigiéndose a la asamblea dijo: “Todos somos responsables de su fidelidad, porque profesaron sus votos ante nosotros. Esto nos compromete a rezar por ellas, a acompañarlos en el camino de la vida hoy, en este momento de celebración, pero también después”.
Al final de la Celebración, las Nuevas profesas, con la Madre General, las Maestras y los celebrantes, se dirigieron a los altares de Don Bosco y Madre Mazzarello para colocar una lámpara encendida y encomendarse a su protección.
