Roma, Italia). La Madre General del Instituto de las Hijas de María Auxiliadora, Sor Chiara Cazzuola, en la Circular n°1031 comparte algunas etapas concretas del camino post-capitular que estamos siguiendo como Instituto.
En primer lugar, recuerda “la hermosa experiencia de la Jornada Mundial de la Juventud de Lisboa, Portugal, del 1 al 6 de agosto de 2023, “de la que todavía tenemos muchas imágenes en los ojos y en el corazón”. La Madre relata en primera persona las emociones y los sensaciones vividas, observando en particular a los jóvenes, que participaron con entusiasmo, convicción y apertura a la escucha, “siempre sonrientes y amables, misteriosamente pacientes”, a pesar de las colas y los inconvenientes.
En las banderas que desfilaron juntas, “enarboladas por jóvenes serenos y alegres”, la Madre reconoce “un signo profético, que va a contracorriente” frente a las tendencias actuales de construir muros y encerrarse en prejuicios y sospechas. “Los jóvenes son verdaderamente un signo significativo de universalidad y de paz que habla al mundo: ¡un signo de esperanza para el presente y el futuro!”, afirma.
“¿Qué llevar contigo al volver a la vida cotidiana?”. Es la pregunta que el Papa Francisco dirige a los jóvenes en la homilía de la Celebración Eucarística de clausura de la JMJ pero que, dice Madre Chiara, “es ciertamente una pregunta existencial dirigida también a nosotros, los adultos, que acompañamos a los jóvenes”.
La Madre agradece a las comunidades y a las FMA “que acompañaron a los numerosos grupos juveniles, concretando la realidad del Movimiento Juvenil Salesiano”, cuya presencia, en medio de la multitud, era reconocible “por los numerosos signos salesianos, visibles sobre las camisetas, en las banderas y pancartas”. Los diferentes grupos – alrededor de 8.000 jóvenes y sus acompañantes – se reunieron el 2 de agosto en la Casa Salesiana de Estoril, para vivir juntos, “en una jornada de fiesta al estilo oratoriano, la espiritualidad salesiana con la que se identifican”, acogiendo el tema Ven, Vive, Anuncia.
Lo define como “un día inolvidable, interesante por la riqueza de las aportaciones ofrecidas, y sobre todo por la última parte de la jornada en la que los jóvenes del MJS dieron vida a una creativa y bella representación del sueño de nueve años” seguida de la Vigilia con la adoración eucarística en la que, subraya, “el silencio absoluto y lleno de oración que se creó entre los jóvenes fue la constatación más elocuente y significativa de la gran labor educativa y formativa que se realiza en la comunidades locales”.
Una espiritualidad sinodal
Hay varios acontecimientos en preparación al próximo Sínodo sobre la Sinodalidad: se espera que los jóvenes lleguen a Roma el último fin de semana de septiembre, “para compartir y caminar juntos como pueblo de Dios, en el diálogo que reconcilia, abre a los demás y ayuda a construir la paz” y en la Vigilia ecuménica de oración que presidirá el Papa Francisco el 30 de septiembre en la Plaza de San Pedro, “hermanos y hermanas de todas las confesiones cristianas fueron invitados a encomendar a Dios los trabajos de la XVI Asamblea General Ordinaria de Sínodo de los Obispos”, cuya primera sesión se celebrará del 4 al 29 de octubre.
Madre Chiara señala la crisis ecológica y el clamor de los pobres como prioridades que emergen en la oración y en el tejido del Sínodo y que interpelan a los creyentes, y por tanto también a las FMA, “como educadoras consagradas”.
Después expresa, como Instituto, su sintonía con el Instrumentum laboris, “donde la llamada vuelve a menudo al sueño de una Iglesia cada vez más sinodal en sus instituciones y estructuras, de un espacio en el que se respeten la común dignidad bautismal y la corresponsabilidad en la misión no sólo se afirme, sino que se practiquen”.
Convencida de que “la sinodalidad sigue siendo para todos el camino privilegiado de conversión, porque puede renovar la Iglesia en su unidad”, la Madre reconoce cómo “participar en este proceso nos ayuda, como familia religiosa, a asumir, cada vez más conscientemente, la dimensión de comunión del camino y de la misión que se nos ha confiado” y cómo, tras una lectura atenta del Instrumentum laboris, “la espiritualidad salesiana está en plena sintonía con la espiritualidad sinodal”.
El Seminario para una autoridad generadora de vida
Respondiendo al mandato del XXIV Capítulo General, la Madre y las Consejeras Generales decidieron “dedicar juntas un tiempo útil de estudio y profundización para encontrar el modo de comprender y vivir la autoridad como servicio, como animación y gobierno en una sociedad con estilo evangélico y salesiano” a través de un Seminario de Conferencias Interinspectoriales con el tema: “Por la animación generativa“.
“Nos sentimos llamadas a cultivar un estilo de animación participativo, con actitud generativa centrada en los valores evangélicos, para favorecer la expresión y la contribución de todas en la búsqueda del bien común y en el ejercicio de la propia responsabilidad” ( cf. Actas CG XXIV , n. 15).
La primera en vivir el Seminario, del 25 al 29 de agosto en Lusaka (Zambia), fue la Conferencia Interinspectorial África – Madagascar (CIAM): unas ochenta hermanas vivieron la experiencia “en un clima de juventud, esperanza y compromiso”.
Dl 19 al 23 de septiembre tendrá lugar en Italia, en Frascati (Roma), el Seminario de la Conferencia Interinspectorial Oriente Medio y Europa (CIME), con la participación “consistente y colaborativa” de las hermanas de las 22 Inspectorías y Visitadurías que la componen.
El proceso de revisión y actualización del Proyecto Formativo y de las Líneas Orientadoras de la misión educativa del Instituto FMA
La Madre concluye la Circular con una actualización “sobre la reflexión iniciada en los últimos meses sobre las líneas orientadoras de la misión educativa de las Hijas de María Auxiliadora”.
Con el objetivo de realizar, a través de “un proceso participativo caracterizado por la escucha, el discernimiento y la implicación”, la revisión y actualización del Proyecto Formativo del Instituto FMA y de las Líneas Orientadoras de la misión educativa, encomendadas por la Asamblea Capitular al Consejo general, se ha creado un grupo internacional de trabajo que actúa, a través de varias fases, para implicar a todo el Instituto, teniendo en cuenta los diferentes niveles.
Se trata – explica Madre Chiara – de “un proceso sinodal ampliado”, que involucra a todos los miembros de la comunidad educativa y de “un camino gradual y convergente, unitario”, que pide a cada FMA acompañar con la oración, el ofrecimiento y la implicación eficaz, “para que el Espíritu Santo nos guíe, nos dirija a elegir para el Instituto siempre y sólo lo que está en su voluntad”.
En el umbral del mes de octubre, dedicado a Nuestra Señora del Rosario, confía a la potente intervención de María, Madre y Auxiliadora, el inicio del Sínodo y el camino de la Iglesia.
Grazie Madre Chiara per la Sua parola che accompagna, indica e sostiene. Grazie per il Suo esserci con i suoi passaggi nelle diverse comunitá, nelle Ispettorie, accanto ai giovani, con cuore di Madre. GRAZIE