Turín (Italia). La 3a y penúltima de las Jornadas de Espiritualidad de la Familia Salesiana, en Turín-Valdocco del 13 al 16 de enero de 2022, ha tenido por la mañana un evento significativo en apertura del año dedicado a San Francisco de Sales, en el 400° aniversario de su muerte (1622-2022): La inauguración de la exposición San Francisco de Sales 400, que será visitable hasta el 15 de enero de 2023 en el Museo Casa Don Bosco de Valdocco.
Sobre el escenario, con Mons. Cesare Nosiglia, Arzobispo de Turín, el Rector Mayor, Don Ángel Fernández Artime, y los ponentes de la Conferencia inaugural de la exposición, el coro, compuesto por las Postulantes de las Hijas de María Auxiliadora de la Comunidad “Maria SS. Consolata” de Turín y por otros jóvenes, siguió el himno a San Francisco de Sales compuesto por Maurizio Palazzo, SDB, “Il cuore parla al cuore”.
Las Postulantes, que han vivido “en presencia” diversos momentos de las Jornadas, cuentan la experiencia:
Las Jornadas de Espiritualidad de la Familia Salesiana han sido ocasión de empezar a conocer y gustar la espiritualidad del Santo de Annecy que estamos invitados a profundizar en este año. Hemos tenido la posibilidad de vivir jornadas de encuentro, escucha, diálogo y compartición que en seguida han generado en cada una mucha gratitud por la pertenencia a la multiétnica y multifacética Familia Salesiana.
En la presentación del camino que nos espera en este año hemos sido acompañados por guías preparadas y apasionadas, que han evidenciado diversas características de la figura de Francisco de Sales. La mesa redonda, celebrada por la tarde del viernes 14 de enero, puso en diálogo a expertos sobre la espiritualidad de Francisco, quienes ofrecieron su reflexión sobre diferentes aspectos de la vida del Santo.
Las jornadas fueron seguidas por miles de personas en todo el mundo, aunque la participación en Valdocco estuvo limitada a 150 personas, por motivos ligados a la pandemia. Los que han podido tomar parte en la experiencia “en presencia”, han enriquecido las reflexiones con la visita a diversos lugares salesianos y la inauguración de la exposición dedicada a San Francisco de Sales a los 400 años de su muerte, en el Museo Casa Don Bosco.
No han faltado en estas jornadas los testimonios directos de espiritualidad salesiana encarnada en la vida diaria y la posibilidad de vivir la oración y la Celebración Eucarística en la riqueza de la diversidad que se reconoce en la unidad de la Familia.
La tarde de la 3ª Jornada ha estado dedicada a compartir en la asamblea las experiencias del mundo, como la de los jóvenes del Movimiento Juvenil Salesiano de Mumbai, que han dado vida a un grupo de trabajo para ayudar a los afectados por el virus, buscando la disponibilidad de oxígeno, plasma y cilindros de hospitalización. Otros video-testimonios han mostrado la concreción del carisma salesiano en el servicio apostólico y caritativo de los Grupos de la Familia Salesiana.
En el día dedicado a la memoria del Beato Luigi Variara, se ha proyectado el video-documental de las Hijas de los Sagrados Corazones de Jesús y María, el Grupo de la FS fundado por él para el cuidado de los enfermos de lepra de Agua de Dios (Colombia), donde llegó como misionero enviado por Don Michele Rua, 1er sucesor de Don Bosco.
Sentimos nosotras las Postulantes mucha gratitud por lo que hemos podido vivir y lo captamos en los comentarios que hemos intercambiado estos días:
“Me ha gustado porque he podido profundizar un poco más el Aguinaldo y conocer mejor la figura de San Francisco de Sales, su espiritualidad, y ver cómo se actualiza”.
“Las Jornadas salesianas han sido para mí significativas y llenas de santas enseñanzas”.
“Es de verdad un don vivir estos días de familia y de Iglesia profundizando la espiritualidad de San Francisco de Sales. Es hermoso ver cómo cada Grupo de la Familia Salesiana ha asumido de manera única un aspecto de la vida de Cristo, haciendo “todo por amor y nada por la fuerza” y llevando a los jóvenes a Él”.
“Una experiencia de gran comunión fraterna”.
Podemos decir con fundamento: “¡Realmente somos una Familia … que respira Paraíso!“.
